miércoles, 2 de julio de 2014

Mi principal problema es que me he dado cuenta demasiado pronto que a nadie le importa nada. Solo espero que eso no me haga caer en la vejez prematura que contagia a todos los individuos de esta sociedad.

jueves, 19 de junio de 2014

Cuando la gente tiene poco trabajo y se comporta como realmente es, puedes llegar a conocerlos y perderles el poco respeto que ya les tenías.

jueves, 29 de mayo de 2014

Todos los héroes, pensadores, conquistadores, descubridores, próceres, etc. de la historia son personajes sobrevalorados. De ellos no podemos decir a ciencia cierta ninguna cosa excepto que tuvieron un buen publicista.

martes, 27 de mayo de 2014

La igualdad de oportunidades es algo que queda muy bonito en sus idearios. En los textos que, finalmente, se cumple, suelen aparecer también hadas, elfos y dragones.
Arte: ¿Cuál es la diferencia entre un aficionado y un profesional? Que el profesional vive de lo que le gusta, y el aficionado le roba horas al sueño para trabajar gratis.
¡Como vea a otro profesional quejarse!

lunes, 26 de mayo de 2014

-He visto a niños de seis años discutir en el patio del colegio con más y mejores argumentos que aquellos que nos gobiernan y deberían ser ejemplo.
- ¡Y tú más!

miércoles, 16 de abril de 2014

Ustedes sigan recortando la educación de sus súbditos que, cuando no sean capaces de articular palabras, tan solo les quedarán los puños para expresarse.

domingo, 30 de marzo de 2014

Formamos parte de una sociedad que otorga poder a los más cafres, a los que tienen más amigos, o a los que demuestran más ambición. Y luego nos quejamos.

martes, 25 de marzo de 2014

Me he vuelto a dar cuenta de la vasta estupidez humana al encontrarme que los teléfonos móviles, con toda su tecnología, aplicaciones, conectividad, posibilidades y mandangas, se pueden poner en modo avión. Pero no se pueden poner en modo solo teléfono.
Cuanta más gente joven conozco, más sale de mí la faceta de maestro y más veces me golpeo contra un muro infranqueable.
¡Qué ignorantes somos al creer que podemos luchar contra la ignnorancia!

martes, 18 de marzo de 2014

Analogía de la seguridad vial con una sociedad decididamente enferma.

Conducir siempre en el límite de la velocidad máxima permitida o diez kilómetros por encima de ésta. Lo cual, aunque ridículo, ya es punible.
Y pensar, al ver al resto de los vehículos surcando el pavimento como si fueran saetas, que tengo algo de tortuga, o de gilipollas.
Y saber, sin lugar a equívoco, que si se apostara un radar o un agente de la ley para vigilar estas conductas, al único que detendrían y multarían, es al que no dobla la velocidad que indican las señales.
Y levantar un poco el pie del acelerador para ponerme dentro del límite.
Y ser abocinado sin contemplaciones, increpado y burlado.

jueves, 13 de febrero de 2014

Mientras que, al llegar a un lugar, haya que "ganarse el respeto" en lugar de gozar de un voto de confianza, seguiremos viviendo con las mismas normas de convivencia que los hombres de las cavernas.